Este verano de 2011, conocidos ya los grupos de Champions League de la temporada 2011/2012, el Nápoles, que quedó encuadrado en el grupo de la muerte -junto con Bayern de Munich, Manchester City y Villarreal- anunció que se hacía con los servicios de Goran Pandev esta temporada, delantero macedonio proveniente del Inter de Milán, donde entre otras cosas, ganó la UCL de 2009/10. Estea cesión se unía al fichaje de Gokhan Inler, procedente del Udinese, para hacer un Nápoles mucho más fuerte que la pasada temporada.
Curiosamente, este jueves 12 de enero, ambos jugadores fueron lo mejor del equipo napolitano en la sufrida victoria (2-1) que les valió el pase a la siguiente ronda de la Coppa Italia ante un Cesena muy inferior por plantilla pero que supo jugar sus bazas y a punto estuvo de dar la sorpresa en San Paolo. Pandev salió desde el banquillo en la segunda parte para revolucionar el partido y dar un punto de profundidad al equipo que era lo único que le faltaba. Inler, en cambio, llevó la batuta del juego durante toda la primera parte y en la segunda fue sustituido.
Goran Pandev ingresó en el partido en el descanso, quedándose fuera Vargas, que hizo un partido que significó su debut con el Nápoles y donde dejó mucho que desear. El ex de la Universidad de Chile estuvo desaparecido durante los 45 minutos que estuvo en el campo y además tuvo la mala fortuna de ser el asistente -sin querer, claro- de Popescu para que este hiciera el 1-0 inicia. El chileno intentó controlar un balón que venía de la derecha pero se le fue largo para su portería, dejando solo contra el portero al antes nombrado Popescu para que hiciera el gol.
Después del gol el equipo local se hizo con el control total del juego y el Cesena se echó atrás a intentar mantener el 1-0 que les valía para pasar. Hacían tímidas contras que eran bien cortadas por el Nápoles y se defendían realmente bien de un Nápoles que no encontraba espacios. Inler, que era quien llevaba el juego, los buscaba e intentaba asociarse con sus compañeros pero nada le salía al Nápoles donde además de Vargas, también estuvieron apagados en la primera parte Hamsik y Cavani, que no tuvo su mejor día a pesar de marcar uno de los goles. Zúñiga, que hizo un partido soberbio, fue de lo mejor en la primera parte con el antes nombrado Inler.
En la segunda parte la cosa cambió con Pandev. El protagonismo de Inler (antes de abandonar el campo) bajó notablemente y Hamsik empezó a aparecer más y a combinar con el macedonio. Además de esos dos, que solían ir por la izquierda, también se incorporaba en muchas ocasiones Dossena poniendo peligrosos centros que casi nunca encontraron rematador. Al final llegó el más que merecido empate para el equipo napolitano. Fue en el rechace de una falta provocada por Zúñiga y lanzada por Pandev. Cavani, que empezaba a desesperarse, vio ahí su oportunidad y no la desaprovechó. El Nápoles había empatado, tocaba ir a por la victoria.
El Cesena reaccionó un poco pero no le fue suficiente para hacer otro gol que ya habría sido demasiado regalo para lo poco realizado durante el partido. Si lo consiguió Pandev. De nuevo llegó el gol a balón parado y no en jugada, de nuevo una falta lanzada por Pandev, que esta vez fue el autor del gol con un lanzamiento directo desde la esquina derecha del ataque napolitano. Pandev fue clave en la victoria de su equipo, sus faltas son un peligro como se vio, pero no solo eso, sino que el macedonio aportó mucho más, como por ejemplo algo de profundidad de la que necesitaba el equipo. Aún así, no fue un gran partido de los locales que no estuvieron a la altura en cuanto a juego ante un equipo que se encerró muy bien atrás. Las faltas les salvaron.
Foto: mercafutbol.com
0 comentarios:
Publicar un comentario